Si hay algo que todos deberíamos tener en nuestras finanzas personales es un fondo de emergencia. Un colchón financiero que te permita afrontar imprevistos sin tener que pedir un préstamo o recurrir a la tarjeta de crédito. Pero, ¿dónde guardar ese fondo de emergencia?
Veamos por qué una cuenta de ahorro es una de las mejores opciones y cómo puedes sacarle el máximo partido.
Tener un fondo de emergencia te da tranquilidad. Saber que si ocurre algo inesperado, como una reparación urgente en casa o un problema de salud, tienes el dinero necesario para cubrirlo, es un alivio enorme.
Pero, para que tu fondo de emergencia realmente sea útil, necesitas guardarlo en un lugar adecuado. Y ahí es donde entra en juego la cuenta de ahorro.
Por qué una cuenta de ahorro es ideal para tu fondo de emergencias
Quizás te estés preguntando, ¿por qué una cuenta de ahorro y no una cuenta corriente o incluso una inversión? Pues bien, la razón principal es la accesibilidad. Un fondo de emergencia tiene que ser accesible de forma inmediata. No tiene sentido tener el dinero guardado en una inversión que tarde días en liquidarse o que implique pagar comisiones para retirarlo. La clave de un fondo de emergencia es que sea líquido, es decir, que puedas disponer de él rápidamente cuando lo necesites.
Una cuenta de ahorro te permite hacer precisamente eso: tener tu dinero separado del resto de tus finanzas, pero con la posibilidad de acceder a él en cualquier momento. Además, una cuenta de ahorro suele ofrecerte algo de rentabilidad. No es una rentabilidad alta, pero al menos el dinero que tienes guardado no está parado del todo. Eso sí, no confundas una cuenta de ahorro con otros productos de inversión, ya que el objetivo aquí no es hacer crecer tu dinero, sino tenerlo disponible y seguro.
Otro punto a favor de las cuentas de ahorro es que puedes crear una barrera psicológica con tu dinero. Al estar en una cuenta diferente a la de tu día a día, no lo ves tan fácilmente y, por tanto, no te resulta tan tentador gastarlo. Esto te ayuda a mantener la disciplina y a usar ese dinero solo en situaciones realmente necesarias.
Cómo elegir la mejor cuenta de ahorro para tu fondo de emergencias
No todas las cuentas de ahorro son iguales, y si quieres guardar tu fondo de emergencia en una, hay algunos aspectos que deberías tener en cuenta para elegir la que mejor se adapte a tus necesidades. Aquí te dejo algunos consejos para tomar la mejor decisión:
- Sin comisiones: asegúrate de que la cuenta de ahorro no tenga comisiones. No tiene sentido pagar por tener tu dinero guardado, especialmente cuando hablamos de un fondo de emergencia. Busca una cuenta que sea completamente gratuita, tanto en mantenimiento como en las operaciones básicas.
- Acceso inmediato: como ya hemos mencionado, el acceso al dinero debe ser rápido y sencillo. Asegúrate de que la cuenta te permite retirar el dinero sin restricciones ni penalizaciones. Algunas cuentas de ahorro tienen límites en el número de retiradas que puedes hacer al mes, así que asegúrate de que esto no sea un problema.
- Rentabilidad: aunque el objetivo principal de un fondo de emergencia no es obtener rentabilidad, siempre es un extra agradable que tu dinero gane algo mientras está guardado. Compara las diferentes ofertas de cuentas de ahorro y elige una que te ofrezca al menos un pequeño interés por tener tu dinero allí.
- Facilidad para ahorrar: algunas cuentas de ahorro tienen funciones que te permiten automatizar tus aportaciones. Por ejemplo, puedes configurar una transferencia automática cada mes desde tu cuenta corriente para ir construyendo tu fondo de emergencia sin esfuerzo. Esta es una excelente forma de mantener la constancia y asegurarte de que no te olvidas de aportar a tu fondo.
Otra opción que puedes considerar son las cuentas de ahorro que ofrecen bonificaciones por cumplir ciertos objetivos. Por ejemplo, algunos bancos ofrecen una pequeña bonificación si mantienes el saldo por encima de una cierta cantidad durante un tiempo determinado. Aunque no es algo esencial, siempre viene bien una pequeña ayuda extra.
Mantén tu fondo de emergencia separado y seguro
Una vez tengas tu cuenta de ahorro, es importante que te comprometas a usarla solo para emergencias. Recuerda que este fondo no está ahí para pagar unas vacaciones, ni para darte un capricho. Está para cubrir imprevistos, y debes mantenerlo separado del resto de tus finanzas para que cumpla su propósito.
Establece un objetivo para tu fondo de emergencia. Lo ideal es que cubra entre tres y seis meses de tus gastos básicos. Eso incluye alquiler o hipoteca, comida, servicios básicos, transporte, y cualquier otro gasto esencial. Este objetivo te dará un número concreto al que apuntar y te ayudará a mantener la motivación mientras vas ahorrando.
Además, revisa tu fondo de emergencia de vez en cuando. La vida cambia, y también lo hacen nuestros gastos. Si tu situación cambia (por ejemplo, si tienes un hijo o cambias de trabajo), es posible que necesites ajustar la cantidad de tu fondo de emergencia para que siga cumpliendo su función de manera efectiva.