Bancos españoles ofrecen nuevas cuentas corrientes con beneficios fiscales para inversores extranjeros

Puede que no se hable mucho de esto en los grandes medios, pero en los últimos meses los bancos en España se están moviendo. Y lo están haciendo para seducir a un perfil muy concreto: el del inversor extranjero que quiere poner un pie aquí, abrir una cuenta y, de paso, beneficiarse de ciertas ventajas fiscales. Que las hay, y no son pocas.

En un contexto en el que la competencia por atraer capital internacional es cada vez más intensa, algunas entidades han decidido dejarse de productos genéricos y crear cuentas corrientes a medida, pensadas justo para eso: para quien viene de fuera, con ganas de invertir, pero también con cabeza para mirar bien dónde le tratan mejor.

Madrid, en cabeza con sus deducciones fiscales

Una de las regiones que ha tomado la delantera en esto es la Comunidad de Madrid. Desde hace unos meses está aplicando una deducción del 20% en el IRPF para inversiones en empresas locales, dirigida a extranjeros que se conviertan en residentes fiscales allí. No es algo improvisado: la medida busca competir directamente con otras capitales europeas que llevan tiempo ofreciendo beneficios similares.

El único requisito importante —y aquí es donde hay que prestar atención— es que el inversor mantenga su participación durante al menos seis años. No es para quien viene a hacer un movimiento rápido, sino para quienes tienen intención de quedarse o, al menos, de apostar a medio plazo.

Los bancos responden con productos adaptados

Los bancos, como no podía ser de otra forma, han visto ahí una oportunidad. Y están ofreciendo cuentas corrientes diseñadas específicamente para este tipo de cliente. No se trata solo de ofrecer IBAN español y ya está, sino de dar un producto que combine operativa ágil con asesoramiento y ventajas fiscales.

Estas cuentas suelen venir acompañadas de:

  • Acceso multimoneda, ideal para quienes manejan euros, dólares, libras o lo que toque en cada momento, sin tener que pelearse con comisiones absurdas.
  • Gestión personalizada, con asesores que no solo ayudan a abrir la cuenta, sino que orientan sobre posibles inversiones con beneficios fiscales incluidos.
  • Plataformas en varios idiomas, que pueden parecer un detalle menor pero marcan la diferencia cuando tu cliente no habla español y necesita sentirse cómodo operando.

Y aunque no todos los bancos se han subido todavía al carro, cada vez son más los que entienden que atraer a este tipo de perfil no solo es rentable, sino que mejora su imagen y posicionamiento.

Lo interesante de todo esto es que, por primera vez en mucho tiempo, se está viendo una oferta bancaria en España pensada de verdad para un nicho específico. Y con ventajas fiscales potentes, no solo descuentos en comisiones o regalitos de bienvenida.

Así que si estás leyendo esto desde fuera de España, tienes interés en mover capital aquí y no sabías que existía esta posibilidad… ahora ya sí. Y si ya resides en España pero aún no te has beneficiado de este tipo de cuentas, quizá sea buen momento para mirar qué ofrece tu banco. O cambiar, directamente.

Publicidad

Comments are closed.